Temario-gu?a formaci?n en servicio de vigilancia en centros de internamiento y dependencias de seguridad

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En Espa?a, la criminalidad juvenil no es preocupante. Casos como la brutal paliza al joven Alexandru en la localidad vizca?na de Amorebieta no son frecuentes. Pero los menores delinquen. La mayor?a de los delitos en justicia juvenil son lesiones (30,6 %), robos (19,2 %) y hurtos (9,2 %), mientras que los homicidios y las agresiones sexuales tan solo resultan un 0,2 y 0,3 %, respectivamente, seg?n datos de 2020 del Instituto Nacional de Estad?stica. El temario de esta formaci?n viene establecida desde la entrada en vigor, el pasado 18 de agosto de 2011, de la Orden Ministerial INT/318/2011, de 1 de febrero sobre personal de seguridad privada y por la Resoluci?n de 12 de noviembre de 2012, de la Secretar?a de Estado de Seguridad, por la que se determinan los programas de formaci?n del personal de seguridad privada. Seg?n el BOE n? 296 de 10 de diciembre de 2012, se requiere formaci?n espec?fica para la prestaci?n de los diferentes servicios que un vigilante de seguridad pueda llegar a realizar y se recoge la obligatoriedad de la realizaci?n de dicha formaci?n. En 2020 fueron condenados en Espa?a por sentencia firme 11.238 menores, un 20,4 % menos que en 2019. Aunque el ?ndice de delincuencia juvenil no sea preocupante, tampoco debemos pasar por alto la violencia con la que se relaciona a diario una parte de los adolescentes, una dura realidad que tambi?n existe y que se manifiesta no solo en las calles. Hay muchas violencias: acoso escolar, sexual, filioparental (la ejercida de los hijos a los padres)… Pero su versi?n m?s sangrienta y medi?tica han sido, sin duda, los linchamientos. Las im?genes en las que se puede observar a una manada de j?venes agrediendo salvajemente producen da?o e indignaci?n en la gran mayor?a de la sociedad, que se pregunta por qu?. En todos los procesos judiciales en los que hay adolescentes implicados, el departamento fiscal cuenta por ley (L.O. 5/2000) con un equipo psicosocial especializado que realiza una evaluaci?n psicol?gica de este menor. Las conclusiones se plasman en un informe que facilita al juez la decisi?n a la hora de dictar sentencia sobre qu? medida educativa ser? la m?s ajustada a ese adolescente. Bas?ndonos en esos informes, sabemos que no existe un perfil ?nico. “Es complicado realizar un perfil psicol?gico, precisamente porque no debemos caer en etiquetas ni t?picos, que no hacen m?s que estigmatizar a estos adolescentes que, por muchas causas, acaban cometiendo actos vand?licos o agresivos. Pero, tanto desde la psicolog?a como desde la criminolog?a, s? existe una serie de factores de riesgo en el comportamiento violento o antisocial y que est?n relacionados con la familia, la educaci?n, el contexto social y, por supuesto, aquellos aspectos m?s psicol?gicos relacionados con la personalidad del adolescente”.Los profesionales que trabajan con menores conflictivos saben que, cuando se interviene terap?utica o educativamente con ellos, no hay un factor ?nico que nos explique dicha conducta, sino que hay diferentes causas. El reto de los profesionales es identificarlos con la ayuda del joven para poder abordarlos, enumeran algunos factores que hay que tener en cuenta: Carencia afectiva. Padres ausentes. D?ficit en la supervisi?n de lo que hacen.画面が切り替わりますので、しばらくお待ち下さい。
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